Las jornadas de seguridad vial del metro de Granada se han dirigido hoy a profesores de autoescuelas de la provincia de Granada, así como a integrantes de la ONCE, que han podido visitar una unidad del metro ligero estacionada en la parada Estación de Autobuses del recorrido metropolitano.

De esta forma, la delegada territorial de Fomento y Vivienda, Mariela Fernández Bermejo, ha inaugurado, junto al diputado provincial de Obras Públicas y Vivienda, José María Villegas, y el presidente de la Asociación Provincial de Autoescuelas de Granada, José Blas Valero, las Jornadas sobre metro ligero y seguridad vial donde se han analizado especialmente las circunstancias de convivencia del metro con los vehículos privados.

Los consejos y normas de seguridad vial llegan así al colectivo de los profesores de las autoescuelas, fundamental por ser los que forman a los futuros conductores. El tráfico de la ciudad de Granada deberá adaptarse de manera progresiva al paso continuado del metro ligero, sabiendo que en las intersecciones siempre tiene prioridad el metro.

En las jornadas han intervenido expertos y responsables de transportes de ciudades donde ya el metro ligero circula con normalidad, como son Zaragoza y Bilbao. Además, han podido dar sus puntos de vistas otros responsables del tráfico y de la regulación semafórica en la ciudad de Granada.

La campaña de seguridad vial asociada al metro de Granada pretende concienciar y hacer pedagogía sobre la óptima convivencia entre los diferentes modos de desplazamiento y los trenes del ferrocarril metropolitano.

La Consejería de Fomento y Vivienda traslada que tanto peatones como conductores tienen que ir adaptándose al paso de los trenes por el entorno urbano. La Junta insiste, de esta manera, en la necesidad de poner atención en las intersecciones del viario urbano con la traza del metro, ya que se siguen detectando todavía situaciones de ocupación de plataforma, así como de rebase de cruces por conductores con la prioridad del paso para el metro ligero.

Acceso a invidentes

Por otra parte, también esta mañana ha tenido lugar una sesión informativa en la parada próxima a la Estación de Autobuses, dirigida especialmente a los afiliados de la ONCE interesados en conocer el funcionamiento del metro. De esta forma, se ha mantenido una unidad de tren estacionada en la parada y se han explicado principalmente las condiciones de accesibilidad para las personas invidentes.

Este colectivo se ha mostrado especialmente interesado en las máquinas expendedoras de billetaje y en la accesibilidad de las paradas. Desde su diseño, el metro de Granada ha cuidado desde su diseño la accesibilidad para las personas de diferentes capacidades. De esta forma, existen dispositivos técnicos dedicados a facilitar el uso de las máquinas a personas invidentes, como los localizadores acústicos o los sistemas de navegación por voz, además de la simbología braille bajo determinados pulsadores y en los medios de pago. También hay que añadir los recorridos pododáctiles en los itinerarios de las paradas y estaciones, que diferencian colores y pavimentación para facilitar el acceso a invidentes.

El objetivo de estas jornadas consiste básicamente en acercar el ferrocarril metropolitano a los futuros usuarios, proporcionando información sobre el buen uso del metro y de la cohabitación con otros modos de transportes, motorizados y no motorizados, así como con el propio peatón. El personal de orientación, denominado metroguías, desarrolla también su labor pedagógica de manera personalizada con los asistentes.

Durante la jornada de hoy también se ha repartido entre los asistentes de folletos divulgativos del uso del metro, material promocional, así como demostraciones sobre el funcionamiento de las máquinas expendedoras de los títulos de viaje ubicadas en las paradas, y de la validación de las tarjetas en el interior de las unidades.

El metro de Granada, infraestructura impulsada por la Consejería de Fomento y Vivienda de la Junta de Andalucía y cofinanciada con Fondos FEDER de la Unión Europea, consta de un trazado de casi 16 kilómetros de longitud, que discurre por las localidades de Albolote, Maracena, Granada y Armillla, y de los cuales 2,7 kilómetros discurren bajo tierra a través del eje Camino de Ronda–Avenida de América, en la capital. Consta de un total de 26 estaciones y paradas.