Mª Carmen Vílchez: “Incluir el Casco Antiguo en el Catálogo de Patrimonio Histórico es una locura, el municipio perderá las competencias sobre este barrio”
El grupo municipal del Partido Popular en Salobreña critica que la alcaldesa no haya consultado a los vecinos y comerciantes afectados para tomar esta decisión
El grupo municipal del Partido Popular (PP) en el Ayuntamiento de Salobreña ha calificado de “locura” la decisión de incluir el Casco Antiguo de la Villa en el Catálogo de Patrimonio Histórico Andaluz ya que, con esta decisión, el municipio pierde las competencias sobre este barrio. “Nos hemos echado las manos a la cabeza, es una decisión muy importante y que afecta sobremanera al pueblo para tomarla de manera unilateral”, ha asegurado la portavoz popular, Mari Carmen Vílchez.
Y es que, según ha podido saber el PP de la Villa, el equipo de Gobierno socialista no ha consultado ni a los vecinos ni a los comerciantes de la zona esta decisión a pesar de que modificará de manera considerable su día a día; al tratarse de una zona protegida existen una serie de restricciones respecto al uso del espacio que vaya mucho más allá de cuidar las fachadas o la vía pública.
“La alcaldesa ha metido a los vecinos del Casco Antiguo en una burbuja, sin pensar que además de cuidar el patrimonio histórico de la localidad hay que cuidar el bienestar de los ciudadanos a los que acaba de complicar su vida diaria”, ha continuado Vílchez para quien, además de crear una discriminaciones entre los salobreñeros del Casco Antiguo y la zona más nueva, los obliga a cumplir una serie de requisitos incluidos en el Decreto Ley.
El cuidado, como Patrimonio Histórico, y denuncia de posibles descuidos del espacio público recae en los vecinos “a los que, sin embargo, ni siquiera se les ha preguntado nada sobre esta decisión”. Dejarán de ser competencia del
Ayuntamiento para pasar a manos de la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía.
Rufino vuelve a incumplir su promesa electoral de ser un gobierno participativo ya que, no sólo no tiene en cuenta a la oposición, sino que tampoco a los vecinos para cuestiones de gran calado para la vida y funcionamiento del municipio.