UGT, con motivo del Día Internacional del Migrante, que se celebra este 18 de diciembre, recuerda la contribución de las personas migrantes a nuestra provincia, desde el punto de vista económico, social y demográfico. Destaca que la inmigración hace crecer la población, en general, y la de nacionalidad española. Asimismo, contribuye a rejuvenecer la demografía, ya que sin la población extranjera, la población menor de 19 años se reduciría. En nuestra provincia, según el Instituto Nacional de Estadística, hay censados 57.281 personas extranjeras, de las cuales, el 2,5% de la población general proceden de países Comunitarios (destacan los naturales de Rumanía con 9.290 y Reino Unido con 5.258), y el 3,7% de la población general proceden de países no Comunitarios, siendo los grupos más numerosos los procedentes de Marruecos (13.632), Senegal (2.367) y China (2.141). Por otro lado, hay 6.664 extranjeros en situación de desempleo que residen en nuestra provincia, que representan el 7,52% del total de parados en la provincia de Granada.

Rosa Mª Muñoz, Secretaria de Igualdad y Mujer de UGT Granada, reclama una verdadera estrategia de retorno, para recuperar la población que se ha perdido de todas las nacionalidades, puesto que aún no se han alcanzado los niveles de 2012, año en que España alcanzó el máximo de población residente. Y es que, como afirma la representante sindical, los migrantes son un factor que hace crecer la población desde hace ya más de 30 años. Ni el país ni la provincia de Granada, ha dicho, pueden entenderse sin el aporte de la migración, sea cual sea su nacionalidad.

Por otra parte, apunta Muñoz (UGT) la población extranjera incrementa la demografía y aporta juventud. Así mientras la población de nacionalidad española va reduciendo el porcentaje de menores de 19 años y aumenta el de mayores de 65 años, con la población extranjera (especialmente de nacionales de terceros países), ocurre lo contrario. En conclusión, conviene tener en cuenta la contribución fundamental de la inmigración, de nacionales de terceros países y ciudadanos de la Unión, al crecimiento de la población en general, y por tanto, también a la economía de nuestra provincia.

Además, recuerda que, aunque no todos los empresarios actúan igual, sí ha habido quienes se han aprovechado de la coyuntura de la crisis para cambiar las condiciones laborales, y no precisamente a mejor: trabajo no declarado, reducciones de sueldo, aumentos de jornada y horas sin contabilizar y, en general, contratos precarios. Esto, que es aplicable a toda la población, se agudiza sin embargo en el caso de los migrantes, explica la representante sindical, que además, en muchos casos están en una posición más vulnerable, debido a situaciones administrativas irregulares, la barrera del idioma, el desconocimiento de la normativa laboral española, etc.

La ugetista señala que varios de los sectores que cuentan con más mano de obra extranjera, son los que más se han precarizado, como la construcción, el sector agrícola o el sector turístico. De ahí que se estén generando situaciones de grave exclusión social incluso entre migrantes que tienen un empleo, y que hasta la crisis habían logrado una plena integración.

Tras manifestar su preocupación por los retrocesos en los derechos de las personas migrantes en los últimos cinco años, la representante sindical ha querido mostrar la solidaridad del Sindicato con las trabajadoras y los trabajadores migrantes, y manifestar la voluntad de UGT de seguir luchando por una equiparación real y efectiva de las oportunidades laborales entre todas las trabajadoras y los trabajadores con independencia de su origen, como factor indispensable para la plena integración social de la población inmigrante en la sociedad granadina.