El delegado del Gobierno, Pablo García, ha mostrado el apoyo de la Junta de Andalucía al trabajo que realiza Proyecto Hombre en la recuperación de personas con algún tipo de adicción. Lo ha hecho durante la visita realizada a las instalaciones, recién reformadas, y posterior presentación de la Memoria 2018 por parte del presidente, Manuel Mingorance, en un acto que ha contado con representantes de otras instituciones, empresas colaboradoras, patronos, personal voluntario.

La reforma de la Comunidad Terapéutica de Proyecto Hombre, ubicada en Huétor Santillán, ha tenido como fin la mejora de la accesibilidad, pero también el hacerla más sostenible y acogedora para las personas usuarias que cada año pasan por sus instalaciones, actuando para ello en dormitorios, baños, techos, suelos, paredes y áreas comunes.

En este proyecto de mejora, la Junta de Andalucía, a través de una subvención de la Consejería de Igualdad y Políticas Sociales, cofinanciada mediante el programa operativo del Fondo Europeo de Desarrollo Regional 2014-2020 (FEDER), hizo posible la instalación de un ascensor con el objetivo de mejorar la accesibilidad del centro.

Para García, Proyecto Hombre “realiza un trabajo impagable en la reconstrucción de personas, ayudándoles a recuperar sus vidas, sus valores, su sentimientos”, y manifestó la voluntad del Gobierno andaluz de continuar trabajando con ésta y todas las entidades que trabajen para el bienestar de la ciudadanía, destacando la importancia de que las administraciones apoyen el trabajo “encomiable”, según calificó García, que realizan organizaciones como Proyecto Hombre.

Según la Memoria de 2018 presentada, a lo largo del 2018 fueron atendidas 1169 personas de forma directa, de las que 862 participaron en algunos de los diferentes programas de tratamiento e intervención con jóvenes y sus familias y además 307 personas recibieron información y asesoramiento sobre adicciones. En materia de Prevención Universal (población general) y Selectiva (colectivos de riesgo) la organización alcanza de forma directa a un total de 5.486 jóvenes.


Perfil

Según se destaca en la memoria, el perfil de usuarios de Proyecto Hombre son los hombres los que demandan ayuda en un porcentaje mayor, en un 87,4% de los casos, frente al 12,6% de mujeres. La media de edad es de 37,6 años: 42,7 en mujeres y 36,8 en hombres. Otro dato interesante es relacionado con la tipología de problemas que llevan a acudir a Proyecto Hombre, siendo los problemas relacionados con la cocaína el mayor de ellos, en un 40,6% del total, seguido del alcohol con un 33,5%, cannabis un 15,5%, la heroína + cocaína 2,5%, psicofármacos 1,8% y un 2,5% presentaban adicciones sin sustancias (juego de apuestas y juegos online).

El 54,6% de las personas no tienen empleo, el 37,8% tienen empleo por cuenta propia o ajena y el 7,6% son pensionistas. También destacar que un 48,6% poseen estudios secundarios, un 43,2% tienen estudios primarios o no tienen estudios y un 8,2% estudios universitarios.

En la Memoria de 2018 se llama la atención sobre el un aumento significativo del 62% de las demandas de tratamiento por parte de profesionales liberales de entre 30 y 40 años que presentan problemas con la cocaína. Para ello Proyecto Hombre ofrece programas de tratamiento con horarios compatibles con la vida laboral. Otro dato destacado del pasado ejercicio es se ha duplicado la demanda de intervención con jóvenes, siendo los problemas de conducta y los consumos de alcohol y cannabis las situaciones más frecuentes, así como con adolescentes con problemas debido a los videojuegos online y juegos de apuestas presenciales/online. Debido a los problemas con jóvenes, se ha producido un gran incremento en la demanda de la Escuela de Madres y Padres, otro de los programas que impulsa esta organización.

Para dar cobertura a las necesidades de las personas que demandan atención Proyecto Hombre dispone de programas adaptados a la situación de cada persona, para lo que se cuenta con un equipo interdisciplinar de 44 personas (25 mujeres y 19 hombres) compuesto por profesionales en psicología, trabajo social, pedagogía, educación social, medicina, derecho y otros (administrativos y monitores).