El reencuentro se produce con la presencia de su impulsor, entonces alcalde de Almuñécar, José Antonio Bustos.
La alcaldesa de Almuñécar, Trinidad Herrera y el alcalde de Cariñena (Zaragoza), Sergio Ortiz, acompañados por varios miembros de las corporaciones de ambos municipios han procedido al acto de renovación de juramento de hermanamiento entre Almuñécar y Cariñena.
El hermanamiento se produjo en el año 1973 y fue impulsado por el entonces alcalde de Almuñécar, José Antonio Bustos, que fue invitado al acto y contó varias anécdotas de la época.
La Alcaldesa de Almuñécar, Trinidad Herrera, en un entrañable discurso dio la bienvenida a la comitiva aragonesa y comentó que “tras 46 años es un honor que volvamos a reencontrarnos, a reforzar nuestros lazos de unión y que sean permanentes, dentro de un espíritu de concordia y colaboración que sea beneficioso para ambos municipios y para nuestros ciudadanos”.
Herrera explicaba que Almuñécar tiene la costumbre de acoger como habitantes suyos a todos los que nos visitan y nos honran con su presencia y tenemos una historia milenaria que da fe de ello.
La firma de la renovación del hermanamiento, señalaba la regidora sexitana, servirá para que “Cariñena ocupe un lugar privilegiado en el Salón de Plenos del Ayuntamiento, junto con el resto de ciudades hermanas de Almuñécar”.
Por su parte el alcalde de cariñena, Sergio Ortiz, ha mostrado su felicidad por el reencuentro y ha agradecido especialmente la presencia de José Antonio Bustos, alcalde de Almuñécar en el año 73, informando que desgraciadamente en el año 94 falleció el ex alcalde de Cariñena que materializo los primeros lazos de unión con Almuñécar.
Sergio Ortiz, ha explicado que en una novela histórica, escrita por el historiador Jesús Corral, describe que Cariñena fue reconquistada para el Reino de Aragón hace 900 años por Alfonso ‘el batallador’ y en un pasaje indica que en el año 1126 una expedición encabezada por el mismo, quiso reconquistar Granada y cuenta que Alfonso ‘el batallador’ pasó por Motril y Almuñécar y “nos ha parecido algo entrañable que una novela histórica aparezcan Cariñena y Almuñécar y os la traemos como regalo”.
Tras la firma de la renovación de la jura de hermanamiento, ambas delegaciones se desplazaron a la calle Cariñena de Almuñécar, donde visionaron una placa colocada entre la plaza Los Magnolios y la propia calle Cariñena y que rememora el hermanamiento de entonces y el reencuentro de ahora.
El Ayuntamiento de Almuñécar ha preparado una serie de visitas y actos durante el fin de semana para la delegación zaragozana a fin también de que conozcan Almuñécar y La Herradura, y sean embajadores en su tierra.