Con un importe de 400.000 euros con cargo al Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia de la UE y dentro del Plan de Sostenibilidad Turística, incluye más de 200 plazas en el solar situado junto al apeadero de autobuses
El alcalde de la Villa, Javier Ortega Prados, junto al concejal de urbanismo y obras públicas, Juan Francisco Gutiérrez, ha visitado la zona donde se instalará la nueva bolsa de aparcamientos tras la adjudicación de la redacción del proyecto y ejecución de las obras a una empresa, por un importe de 400.000 euros con cargo al Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia de la Unión Europea y dentro del Plan de Sostenibilidad Turística. Además, de forma paralela, se está tramitando el nuevo contrato de transporte urbano, que incluye lanzaderas tanto para la playa como para el casco antiguo.
"Aunque, como mínimo, el nuevo parking disuasorio debe contar con doscientas plazas, el objetivo es superar las trescientas", ha explicado Ortega Prados, ya que "el objetivo de esta nueva infraestructura es no solo mejorar la movilidad urbana y facilitar el acceso al transporte público sino, sobre todo, liberar de vehículos el centro histórico haciéndolo más peatonal que nunca".
La idea, según el regidor de la Villa, es que comience a funcionar este verano estando a la espera de la aprobación por parte de la Comisión de Transportes del nuevo contrato, el cual aumenta significativamente tanto las líneas como la frecuencia horaria del transporte urbano del municipio.
“Lo que intentamos es facilitar el acceso a distintos puntos de nuestro municipio mediante el transporte público, tanto para los que nos visitan como para aquellos vecinos que lo deseen al contar ya con un parking público y libre, dando así una importante solución a la masificación de vehículos que sufre, sobre todo, el núcleo histórico”, ha concluido.