
VOX demanda al Gobierno que aclare cuáles serán las consecuencias del parque eólico marino en la costa de Granada
Jacobo Robatto teme la implantación de un centenar de aerogeneradores “casi del tamaño de la Torre Eiffel” en una zona con especial riesgo sísmico y con posible afectación al sector pesquero, al turismo y al descanso de los vecinos
El diputado nacional de VOX por Granada, Jacobo Robatto, ha exigido al Gobierno de Pedro Sánchez que resuelva las dudas que está suscitando entre la población local el proyecto para la construcción de un parque eólico marino en la costa de Granada y parte de Almería. Este parque, que se desarrollaría en los proyectos denominados 'La Pinta' y 'Albaicín', afectaría a una franja litoral cercana a los cincuenta kilómetros en línea recta.
Según ha indicado Robatto, “estaríamos hablando de una superficie de 700 kilómetros cuadrados, equivalente a la superficie de la isla de Menorca, en la que se dispondrían más de un centenar de aerogeneradores sobre el mar teniendo cada uno de ellos una altura de 270 metros sobre el nivel del mar, lo que equivale a una altura casi del tamaño de la Torre Eiffel. Y todo ello a solo siete kilómetros de la línea litoral, rompiendo de forma irrecuperable el paisaje natural de la zona, y con una alta probabilidad de que la cercanía de los aerogeneradores afecte al descanso de los vecinos y provoque malestar por ruido, contaminación lumínica e interferencias electromagnéticas”.
Desde VOX han expresado también sus dudas sobre las posibles consecuencias que pudiera acarrear el proyecto para el turismo y para la actividad del sector pesquero. “Concretamente el sector pesquero, que lleva años sufriendo continuos recortes en su actividad por las políticas de la Agenda 2030 y del Pacto Verde europeo que promueven PSOE y PP, ahora se podrían ver afectados por posibles limitaciones en los caladeros de pesca, además de que siempre existirían riesgos de colisión de las embarcaciones al tener que navegar entre centenares de aerogeneradores gigantescos, ya sean barcos pesqueros o barcos petroleros”, ha afirmado.
El diputado nacional de VOX ha apuntado a la hipocresía del Gobierno respecto a las exigencias medioambientales para unos casos y la laxitud en el caso de las posibles consecuencias para la flora y fauna de la zona por la implantación del parque eólico marino.
“No tiene sentido que el Gobierno rechace la construcción del espigón de Castillo de Baños porque haya una determinada especie protegida, pero que luego abra la puerta a la construcción de más de un centenar de aerogeneradores que ponen a todas las aves en un peligro severo, que podría afectar a toda la fauna y flora de la zona, y cuya alteración podría ser aprovechada para dar lugar a una mayor invasión del alga asiática”, ha indicado incidido en que se pretenden implantar en un lugar cercano a una zona de especial conservación, los acantilados y fondos marinos de Calahonda-Castell de Ferro, la cual tiene unas determinadas restricciones para la pesca, "pero parece no haber limitaciones para instalar más de un centenar de aerogeneradores que van a afectar a la flora y fauna marina de una manera irremediable".
Por último, VOX ha mostrado su escepticismo con el proyecto respecto a la idoneidad de la zona por su actividad sísmica, puesto que “siendo un área que es conocida por tener una probabilidad de intensidad sísmica de VIII sobre XII en la Escala de Mercalli, calificada como destructivo, tenemos severas dudas sobre si es prudente implantar una infraestructura de esta envergadura, ya que las consecuencias en caso de afectación del parque eólico en un terremoto de gran magnitud podrían ser devastadoras”.