
Detenido por robar en casetas de telefonía móvil en municipios de Granada y Jaén
Según la Guardia Civil, el ladrón, que residía de forma itinerante entre ambas provincias, tenía como objetivo robar cable de cobre y baterías de las instalaciones de telefonía para obtener beneficio económico de su puesta en venta en chatarrerías
La Guardia Civil ha detenido a un individuo, de cuarenta y cinco años de edad, por ser el presunto autor de ocho delitos de robo con fuerza en casetas de telefonía móvil, un delito de robo con fuerza en grado de tentativa de una casa de campo, un delito de apropiación indebida de un vehículo a motor y un delito contra la seguridad vial por un intento de atropello a una persona. Además, estaba reclamado por un juzgado para su presentación en sede judicial y también para su ingreso en prisión al objeto de cumplir condena.
El equipo Roca de la Compañía de Armilla, en el marco de la 'Operación Placidium', ha sido el encargado de realizar las pesquisas sobre los robos ocurridos durante los meses de mayo y junio en casetas de telefonía móvil de varios municipios de la provincia de Granada y Jaén, en las que eran sustraídos el cable de cobre, las baterías de plomo y el resto de objetos con cobre de la instalación.
Las investigaciones llevadas a cabo por los agentes se centraron sobre el presunto autor de un intento de robo en una casa de campo situada en una localidad de la zona sur del cinturón de Granada. El sospechoso fue sorprendido por su morador, quien logró frustrar el robo y observar con claridad tanto los rasgos físicos del ladrón como la matrícula del vehículo en el que emprendió la huida. Durante su fuga, este individuo trató además de atropellar al propietario del inmueble. Paralelamente, otros testimonios obtenidos apuntaron la posible implicación de esta misma persona en otros robos cometidos en la provincia de Granada.
Una vez recabada toda la información sobre este individuo, las investigaciones de los agentes apuntaban a que era un gran conocedor de la demarcación que elegía para sus robos, pues muchas de las estaciones de telefonía estaban ubicadas en lugares alejados o en zonas altas y escarpadas de campo o montaña que requerían el uso de un vehículo todoterreno como el que estaba empleando. Por hechos similares, ya contaba con numerosos antecedentes policiales por más de una veintena de robos y hurtos, entre otros.
No obstante, los agentes investigadores se enfrentaban a alguien difícil de localizar, en un principio porque no tenía domicilio conocido y hacía uso particular de un vehículo que no era de su propiedad, hecho por el que fue denunciado también por su propietario. Esta persona, además, mantenía una vida itinerante y tenía como objetivo buscar principalmente casetas de telefonía donde sustraer cobre y objetos metálicos para luego obtener beneficio económico de su venta en chatarrerías.
Ya en el punto de mira de la operación y estudiado su modus operandi, los guardias civiles pudieron, finalmente, localizarlo en una chatarrería del área metropolitana de Granada cuando portaba 2.000 euros en efectivo tras haber realizado una entrega de material. Los agentes recuperaron el material que acababa de entregar.
La investigación ha podido constatar que la actividad de este presunto delincuente en los hechos descritos ha podido originar un perjuicio de más de 100.000 euros en daños en estaciones de servicio de telefonía móvil de ambas provincias, incluyendo su futura puesta en marcha para el restablecimiento del servicio, con la consecuente molestia para los usuarios de las compañías por ausencia del servicio telefónico e internet.
Los agentes investigadores pusieron al detenido a disposición del Juzgado de Instrucción número 9 de Granada, tanto por las dos órdenes judiciales dictadas por los dos juzgados reclamantes así como por su presunta implicación en los delitos anteriormente reseñados, habiéndose decretado para él el ingreso en prisión.