La alcaldesa de Albuñol, María José Sánchez, acompañada por Francisco Martínez Sevilla, historiador, investigador y profesor de la Universidad de Alcalá, ha presentado este miércoles el proyecto y los objetivos del estudio “Cueva de los Murciélagos”.

Sánchez ha agradecido el gran esfuerzo y dedicación de los investigadores, “porque con este estudio vamos a poder situar a la Cueva de los Murciélagos en el contexto internacional de las investigaciones sobre el neolítico y la prehistoria”.

Situada en Albuñol, municipio de la Costa Tropical de Granada, la Cueva de los Murciélagos “es uno de los yacimientos más excepcionales del Neolítico inicial en el Occidente Europeo, dado el nivel de conservación de los restos vegetales y orgánicos por procesos de desecación natural”, afirmaba el investigador.

“En este proyecto se realiza un estudio multidisciplinar de todos los restos arqueológicos recuperados en el yacimiento, además de llevar a cabo una documentación gráfica y limpieza superficial en la cueva, para, en un futuro, poder poner en marcha un acceso que permita su visita, siempre bajo estrictas medidas de protección y conservación de la cueva y la zona que la rodea”.

Martínez Sevilla explicaba que “la cueva de los Murciélagos de Albuñol sería una más de las decenas de cuevas de enterramiento del Neolítico Antiguo y Medio que se distribuyen por el sur de la península ibérica. Sin embargo, hay dos cuestiones que la hacen única: por un lado, desde el punto de vista de la historiografía, es uno de los yacimientos más antiguos donde se refieren poblaciones neolíticas en España; y, por otro lado, el extraordinario nivel de conservación de los materiales orgánicos. Esta última característica hace a “Los Murciélagos” uno de los yacimientos “más extraordinarios del occidente mediterráneo en cuanto a la preservación de restos vegetales de la Prehistoria Reciente.”

Se han conservados cestos, sandalias, utensilios de madera, semillas e incluso pelos, probablemente depositados como ofrendas a los fallecidos. La mayoría de los datos que poseen los arqueólogos para estudiar las poblaciones de la Prehistoria es a través de materiales no perecederos, como los elementos líticos o la cerámica. “Los materiales orgánicos de ‘Los Murciélagos’ abren una ventana a un mundo de la cultura material muy difícil de estudiar en la Prehistoria. Tener la oportunidad de estudiar la tecnología de la madera, las fibras vegetales, las semillas o incluso las decoraciones de estos objetos de una población de hace 7000 años es un privilegio”, informaba Martínez Sevilla.

En este sentido, gracias a la financiación de la Comunidad de Madrid, desde el Área de Prehistoria de la Universidad de Alcalá se coordina un equipo de 11 investigadoras y 5 investigadores pertenecientes a 11 instituciones nacionales e internacionales como: la Universidad de Salamanca, la Autónoma de Barcelona, Córdoba, Granada, Cantabria o Durham en Reino Unido, además evidentemente del propio Museo Arqueológico Nacional.

Martínez detallaba que “el proyecto pretende llevar a cabo un estudio de todo el registro material de la cueva aplicando metodologías de vanguardia. “A partir de este registro actualizado, realizaremos nuevas dataciones de C14, para conocer la cronología de uso de la cavidad, así como técnicas en desarrollo de paleoproteómica, para saber que contenían los recipientes vegetales, junto con análisis de residuos en cerámicas o ADNa de los restos vegetales y humanos conservados, para conocer quiénes eran esos primeros agricultores de la Costa de Granada, de donde procedían y qué cultivaban”.

La campaña de excavación tiene como objetivos principales realizar una documentación gráfica de la cavidad y un modelo 3D, así como sondeos para documentar que uso tuvo la cueva y que cronología. Acercar el conocimiento de los modos de vida y de las costumbres funerarias de estos grupos humanos de un modo accesible al gran público es el objetivo final de un proyecto, cuyos resultados se ofrecerán en los discursos museísticos de ambas instituciones”.

A partir de ahí, concluía la alcaldesa, “seguiremos trabajando en colaboración con este equipo de investigación para poner en valor este importante yacimiento del neolítico, único en Europa, intentando avanzar en él hasta poder hacerlo visitable para los interesados en la prehistória”, concluía.