Cada país del mundo cuenta con sus propias tradiciones para celebrar el Solsticio de Verano, pero en la Costa Tropical de Granada, tal y como sucede en la práctica totalidad del litoral Mediterráneo, el 24 de junio se celebra el Día de San Juan.
Al llegar la madrugada, la tradición nos llevará hasta las playas, para compartir con nuestros amigos el encendido de las hogueras y los baños en el mar bajo la luna de San Juan.
En tiendas, chambaos y a pie de orilla, las familias y amigos se reunirán para celebrar la llegada del verano y romper con lo malo que nos acontece y preocupa.
Hay que quemar en el fuego todo lo malo y lo que no queremos, apuntando en un papel lo más negativo de nuestras vidas. Después, en el mar, pediremos nuestros deseos. Bajo la luna de San Juan y con el agua acariciando nuestros pies, el mar nos traerá lo que pedimos y deseamos. Todo es cuestión de confiar.
En San Juan celebramos la llegada del verano, el amor y la fertilidad. Intentamos limpiar toda la mala energía que nos rodea y romper con lo viejo que nos daña para dar la bienvenida a lo bueno.