Los cauces de la provincia de Granada reciben ocho millones de euros para su mantenimiento ante posibles inundaciones
Las actuaciones, promovidas por la Junta, se realizan en la zona ocupada por la Cuenca Mediterránea Andaluza en Granada, en las comarcas de Zafarraya, La Alpujarra, los Guájares, y todo el borde litoral
La delegada de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural, Carmen Lidia Reyes, asegura que la Junta de Andalucía invierte más de ocho millones de euros en el mantenimiento de los cauces de la provincia para prevenir inundaciones. “En los últimos cinco años se viene actuando en labores de mantenimiento de cauces, prevención frente a inundaciones, restauración fluvial y mejora del régimen natural del dominio público hidráulico con un presupuesto, que con estos dos próximos años, alcanzará más de 8.000.000 de euros, una cifra histórica en nuestra provincia”, asegura.
Estas actuaciones se realizan en la zona ocupada por la Cuenca Mediterránea Andaluza en Granada, en las comarcas de Zafarraya, La Alpujarra, los Guájares, y todo el borde litoral de la provincia. En concreto, en la ramblas del municipio de Albuñol, que ha sufrido los efectos de la DANA del 3 de septiembre, fue objeto de trabajos que incluían la retirada de la caña como especie invasora y la mejora hidráulica mediante la retirada de áridos y otros sedimentos, así como la creación de un cauce de aguas bajas que concentre el caudal en avenidas de poca entidad. “Durante este último temporal, los encauzamientos de la rambla de Albuñol, así como el barranco de las Angosturas, han soportado perfectamente la lluvia recibida, con pequeñas afecciones a vados inundables, que como su propio nombre indica, tienen el carácter de inundable”, precisa Reyes.
La delegada recuerda que en eventos torrenciales “se pueden producir inundaciones no por el desbordamiento de los ríos o cauces públicos al arrastrar el caudal desde la parte alta de las sus cuencas hacia el mar, si no que en ocasiones, la propia escorrentía superficial, si la lluvia ha sido muy intensa puede ocasionar inundaciones localizadas en calles, aceras, otro elementos urbanos, o incluso suelo rural antes de llegar a los cauces propiamente dichos”. “Estas inundaciones de zonas urbanas en ocasiones se producen por el mal diseño de los colectores de pluviales municipales o incluso por la falta de mantenimiento de estos, cuestión que no es competencia de la Administración Hidráulica”, puntaliza la delegada.
El pasado 3 de septiembre se acumularon aproximadamente entre la 17:00 horas y las 19:00 horas en torno a 70 litros por m², es decir, que en dos horas precipitó el 40% de lo que debe caer en veinticuatro horas. Lo que da una idea de la concentración de lluvia, la fuerte intensidad y que se trató de un evento totalmente extraordinario, aunque por suerte muy localizado y no extendido a toda la cuenca de la rambla de Albuñol, lo que habría ocasionado mas problemas.
Carmen Lidia Reyes asevera que en los últimos tres años “se ha actuado de forma continuada en las ramblas de la cuenca, en concreto en Albuñol, se hizo una fuerte inversión en septiembre de 2022 y continuamos hasta hoy” y argumenta que la limpieza de cauces no implica acabar con la biodiversidad y el ecosistema del río.
“En la actualidad, el Gobierno de Juanma Moreno, a través de la Consejería de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural, cuenta con dos contratos de mantenimiento, que suman cuatro millones de euros que se vienen a sumar a lo ya ejecutado recientemente y que suponen una muestra más del compromiso del actual gobierno andaluz y de la Consejera Carmen Crespo con la provincia de Granada y sus municipios”. “No obstante los municipios son los competentes en la limpieza de sus tramos urbanos de ríos, del drenaje superficial de sus zonas urbanas, así como del mantenimiento de sus calles y caminos municipales, así como de asegurar en las zonas rurales el acceso a las fincas por caminos externos a los cauces públicos por donde la ley no permite el trafico rodado”, precisa.
Desde el año 2019, la Junta actúa en mantenimiento y limpieza de los cauces de la Cuenca Meditarránea Andaluza en la provincia de Granada con diversos presupuesto que han ido creciendo progresivamente. La primea encomienda bianual que terminó en el mayo de 2021 tenía un presupuesto de 1.036.400. Desde mayo de 2021 a julio de 2023 se ha ejecutado un presupuesto de 2.060.000 de euros y la actual encomienda de mantenimiento supone un presupuesto inicial (ampliable) de 1.943.000 en dos años, al que se le suma otro presupuesto de en torno a otros 2.000.000 de euros que va a gestionar la agencia AMAYA.
El objeto de los trabajos definidos en estos pliegos de mantenimiento es el de realizar actuaciones de conservación, mantenimiento y restauración en los cauces a fin de facilitar el discurrir de las aguas. En general, las actuaciones que se vienen realizando y continúan tiende a recuperar el funcionamiento natural de los ríos, recuperando los procesos hidrológicos.
Con estos trabajos se contemplan la retiradas de masa arbórea muerta, restos de ramas, vegetación u otros residuos que por diversos motivos hayan sido depositados en los cauces, arrastres de sedimentos y otro materiales que puedan producir riegos de inundación o taponamientos en infraestructuras. Se incluye también trabajos tendentes a eliminar especies invasoras como la caña (Arundo donax), entre otras, y tratamientos con el objeto de impedir su nueva aparición; así como mejoras de la capacidad hidráulica de los cauces.
No obstante, no es el objeto de los trabajos de mantenimiento eliminar toda vegetación de los cauces públicos. Los ríos son entornos con un grado de humedad que propicia la existencia de vegetación de ribera autóctona propia de estos ecosistemas y no se puede, ni se debe, eliminar dicha vegetación de ribera necesaria para el desarrollo de la fauna local, porque supondría una afección medioambiental a los ecosistemas fluviales independientemente del régimen de caudales que cada cauce tenga. Un cauce público es un entorno fluvial con agua superficial permanente o intermitente y no un descampado que debe quedar totalmente desbrozado de vegetación.