Según la Guardia Civil, ocurrido el pasado 18 de julio la aeronave se estrelló y las baterías de litio explotaron al fracturarse
La Guardia Civil ha investigado a un varón de cincuenta y dos años de edad, sin antecedentes policiales, como presunto autor de un delito de incendio forestal, incendio ocurrido el pasado día 18 de julio en el término municipal de Huétor Vega.
El fuego se originó sobre las 8:15 horas del pasado día 18 de julio en las inmediaciones del Camino de los Neveros, en el paraje conocido como Cañada Macuca. El Centro Coordinador de Emergencias de la Junta de Andalucía alertó a la Guardia Civil de la existencia del incendio e inmediatamente se desplazó a la zona una patrulla del Servicio de Protección de la Naturaleza de Granada.
Cuando llegaron al lugar el incendio ya estaba controlado por los medios de extinción de la Junta de Andalucía y había ardido, según manifestó un agente de Medio Ambiente, una extensión aproximada de 0 75 hectáreas.
Los agentes del Seprona inspeccionaron la zona de inicio del incendio y localizaron lo que parecía el rotor principal de una aeronave no tripulada y dirigida por radio control. Al parecer la aeronave colisionó con la línea eléctrica y cayó al suelo. Con el impacto las baterías de litio de la avioneta se rompieron y al exponerse al aire se produjo una intensa oxidación y la explosión de las baterías, y esta explosión fue la que provocó el incendio.
La Guardia Civil puso en marcha una investigación para localizar al propietario de la aeronave. Los agentes localizaron a dos testigos que los pusieron sobre la pista del sospechoso, un hombre al que durante varios días habían visto haciendo volar una avioneta con un mando de radiocontrol.
Una vez localizado e identificado, la Guardia Civil supo que este hombre fue el primero en llamar al servicio de emergencias de la Junta de Andalucía a través del teléfono112 alertando del incendio.
Los agentes del Seprona han investigado a este hombre como presunto autor de un incendio por imprudencia grave.