Las imágenes que ilustran esta noticia tomadas por Fernando Jiménez en la playa del Tesorillo de Almuñécar, muestran la gran intensidad de la calima que está cayendo sobre la costa tropical en este jueves, con mayor intensidad si cabe, que la caída la pasada semana.
Aunque las previsiones hablaban de posibilidad de calima, nadie esperaba que hoy se volviera rojo el cielo y que la tierra del Sáhara flotara de esa manera en el ambiente impidiendo casi respirar con normalidad.
Los vecinos nos mandan fotos y vídeos increíbles de diferentes horas del día en los que el cielo ha ido tornando de amarillo a naranja y después a rojo.
"Cuesta caminar por la calle porque respirar es muy difícil y se mete el polvo en las vías respiratorias y los ojos", nos cuenta Laura.
Teresa está muy "cabreada" porque después de una semana limpiando el polvo y barro que dejó la calima anterior, "hoy cae de nuevo y mucho más espesa y molesta".
Pero a la calima hay que sumarle el fuerte viento de fuerza 8 de Este y Nordeste que azota la zona impidiendo que llueva, "aunque sería aún peor porque la lluvia arrastraría todo el polvo en suspensión hacia la tierra y se haría lluvia de barro".
Por lo tanto, aguantemos este tirón climático tan extraño, que algunos ven como "si viviéramos en Marte en lugar de la Costa Tropical".