La Guardia Civil ha desmantelado cinco centros de producción de marihuana y se ha incautado de 2.475 plantas de cannabis sativa en las localidades granadinas de Atarfe, Huétor Vega, Alomartes-Íllora y Armilla.

Cinco personas han sido investigadas por delitos contra la salud pública por cultivo y elaboración de droga, así como por defraudación de electricidad y también de agua.

Los investigadores de la Guardia Civil descubrieron con la ayuda de los técnicos de la compañía eléctrica suministradora que existían seis dobles acometidas fraudulentas en dos viviendas de la localidad de Atarfe y en otras tres viviendas de Huétor Vega, Alomartes y Armilla, en las que se sospechaba que se pudiera estar cultivando cannabis sativa de manera intensiva.

La Guardia Civil se desplegó en torno a estas viviendas, las registró y descubrió que habían habilitado cinco centros de producción de marihuana.

En Atarfe los agentes de la Guardia Civil descubrieron 593 y 547 plantas de cannabis sativa con sumidades floridas en dos viviendas de la calles Fuente Vaqueros y Camino de Albarrate, e investigaron a dos individuos de veinticuatro y treinta y ocho años de edad, respectivamente, por cultivar droga y por defraudar electricidad y agua.

Posteriormente la Guardia Civil de Íllora desarticuló un centro de producción de marihuana en la localidad de Alomartes, donde los agentes descubrieron una plantación con 526 plantas en avanzado estado de crecimiento. Una mujer de cuarenta y dos años de edad ha sido investigada por un delito contra la salud pública por cultivo y elaboración de droga, y por defraudación de electricidad.

Las dos últimas actuaciones han tenido lugar en Armilla y Huétor Vega. En la primera localidad la Guardia Civil ha intervenido 479 plantas de cannabis que el investigado, un joven de veintitrés años de edad, había distribuido en las tres habitaciones de la casa. Mientras que en Huétor Vega, los agentes de la Guardia Civil han descubierto 330 plantas de cannabis en avanzado estado de crecimiento y han investigado a una mujer de treinta y cinco años de edad por cultivo de droga y defraudación de electricidad.

Estas dos actuaciones de la Guardia Civil se incardinan en la operación Miller, una operación que está desarrollando la Guardia Civil a nivel nacional contra el cultivo y tráfico ilegal de marihuana.