La Guardia Civil ha intervenido un revólver del calibre 22 de procedencia ilícita
La Guardia Civil ha puesto a disposición judicial a un joven, de veinticuatro años de edad, que sobre las 22:30 horas de la noche del pasado 6 de agosto habría presuntamente disparado a su padre con un revólver del calibre 22.
El padre del joven, de sesenta y tres años, recibió un impacto de bala en el tórax, fue atendido por el 061 en el lugar de los hechos y posteriormente trasladado al hospital San Cecilio, de Granada, lugar donde fallecería poco después.
El presunto autor manifestó a la Guardia Civil en el propio domicilio familiar donde sucedieron los hechos, ubicado en la localidad de Ogíjares, que se encontraba manipulando una pistola de gas comprimido cuando por accidente accionó el gatillo, disparándose, y que el proyectil había impactado en el pecho de su padre, el cual comenzó a sangrar de forma abundante, por lo que solicitaron auxilio sanitario.
Sin embargo, en la inspección ocular de la vivienda, los investigadores del grupo de homicidios de la Guardia Civil de Granada encontraron escondida un arma de fuego, en concreto un revólver del calibre 22 al que le faltaba una bala cuyas características coinciden con la que fue encontrada en el cuerpo de la víctima durante la autopsia y que le habría ocasionado la muerte. Al fallecido también se le ha encontrado un impacto superficial en el pecho por proyectil de gas comprimido. El arma, de procedencia ilícita, ha sido intervenida por los agentes para someterla a los exámenes de criminalística procedentes. También han intervenido varias armas de gas comprimido que se encontraban en la vivienda y que pertenecen al detenido.
El presunto autor ha sido puesto a disposición judicial por la comisión de un delito de homicidio y de otro de tenencia ilícita de armas, habiéndose decretado prisión provisional.