El Grupo de Montaña de la Guardia Civil de Granada ha rescatado a un joven, de veintidós años, que se fracturó la espalda al saltar a una poza de agua desde gran altura en el barranco del río Verde.

El joven era un senderista que, en un momento dado, decidió emular a los montañeros que hacen el descenso de ese barranco y saltó a una poza sin saber que desde el punto en el que lo hizo tenía muchas posibilidades de sufrir un grave accidente, como así ocurrió.

Sobre las 15:50 horas de ayer, 11 de agosto, una llamada de la Central de Emergencias de la Junta de Andalucía, el 112, informó a la Guardia Civil que una persona había sufrido un accidente en el barranco del río Verde, en el término municipal de Otívar, al saltar a una poza desde gran altura. Los acompañantes referían que la víctima se quejaba de un gran dolor en la espalda y que tenía dificultad para respirar.

Inmediatamente se activaron dos especialistas del Servicio de Montaña y los pilotos de la Unidad Aérea de la Comandancia de la Guardia Civil de Granada y se dirigieron con el helicóptero al lugar del accidente.

Una vez localizada la víctima en la parte baja del barranco, los pilotos comprobaron que no podían llegar con la aeronave hasta ella. Estacionaron en una zona próxima y los dos especialistas del Servicio de Montaña se dirigieron a pie cargados con el material necesario para atender al herido.

Los agentes comprobaron sorprendidos que habían sentado al herido en una silla de playa, que éste tenía una deformidad en la zona abdominal y que cualquier movimiento le provocaba un dolor insoportable. Todo esto dificultaba enormemente el rescate, ya que un traumatismo abdominal puede tener graves consecuencias si el herido no es tratado debidamente a la hora de movilizarlo. Los especialistas colocaron con sumo cuidado al joven en la camilla y mediante un ciclo de grúa lo introdujeron en el helicóptero y los trasladaron hasta la helisuperficie del 112, donde ya esperaba una ambulancia del 061 para trasladarlo a un hospital de Traumatología de Granada.

Al hilo de este rescate, la Guardia Civil ha querido hacer dos recomendaciones. Si no se poseen los conocimientos necesarios, nunca se debe mover a una persona que haya sufrido un fuerte golpe en la espalda porque puede haber fracturas vertebrales que comprometan o dañen de manera irreversible la médula espinal. El barranquismo es un deporte de riesgo que se debe realizar acompañado de un especialista y equipado con material adecuado. "El especialista te dirá desde dónde y hasta dónde puedes hacer un salto a una poza para minimizar los riesgos; y un traje de neopreno, en caso de accidente, puede evitarte una hipotermia mientras acuden los servicios de rescate en tu auxilio".