Desde hace varios meses, el acuario está cerrado al público. El nuevo cierre de esa instalación se produjo por un cúmulo de desperfectos que se arrastran desde su construcción.
Para Francisco Fernández, concejal de IU Podemos, han pasado demasiados meses y el concejal de Medio Ambiente no da ninguna explicación acerca de los problemas que hacen que esa instalación siga cerrada. Luis Aragón ignora que uno de sus trabajos es informar a las personas que le pagamos el sueldo.
Esta semana, comenta el portavoz de IU Podemos, hemos conocido un episodio que podía haber sido dramático. Hace unos días ha reventado una pecera cilíndrica de grandes dimensiones. Afortunadamente, la explosión de la pecera ha ocurrido en un momento en que no había ningún trabajador cerca de esa instalación. Afortunadamente también, el Acuario sigue cerrado al público.
Ignoramos la naturaleza y la importancia de las deficiencias que hacen que el acuario siga cerrado. Ignoramos el coste que supondrá para la hacienda municipal la reparación de estas deficiencias. Ignoramos cuáles de estas deficiencias son debidas a problemas estructurales y cuáles se pueden achacar a falta de mantenimiento.
Ignoramos todo esto porque el concejal de Medio Ambiente y el alcalde no están cumpliendo con su obligación de solucionar los problemas y, además, informar a toda la ciudadanía de qué está pasando ahí dentro. Al fin y al cabo, es nuestro acuario, es nuestro pueblo, es nuestro dinero finalmente el que paga sus sueldos y el que pagará las obras necesarias para reabrir, no sabemos cuándo, esas instalaciones.
El concejal de IU Podemos exige una auditoría de la situación real del acuario en 2022 y cree ineludible que el gobierno municipal dé la cara y nos informe de los problemas y las medidas que se están tomando y se van a tomar.
Mientras tanto, tenemos que estar contentos porque este cierre prolongado del acuario ha evitado una tragedia.
Ante todo, subraya el concejal de IU Podemos, está la vida de las personas. “Esperemos que no reabran una instalación en la que, en vista de los acontecimientos, no pueden garantizar la seguridad de visitantes y trabajadores. Es necesaria una auditoría ya”, concluye Fernández.