El gobierno de Armilla, formado por el Partido Socialista (PSOE) e Izquierda Unida (IU) ha comenzado la legislatura, según ha denunciado VOX, con una subida "masiva" de impuestos "que ataca directamente al bolsillo de los vecinos del municipio". Y lo ha hecho, según la formación política, "de golpe y de forma indiscriminada con un ansia recaudatoria que refleja de manera diáfana la forma de hacer política y de gestionar de la izquierda". De esta forma, VOX ha lamentado que los vecinos de Armilla tengan que pagar más por el IBI, el Impuesto de Circulación, el Impuesto de Actividades Económicas, el Impuesto de Construcción y Obras y la Tasa de Terrazas. “Van a arruinar a la población en una coyuntura de precios muy elevados, donde cuesta llegar a fin de mes en un ejercicio de insolidaridad muy propio de los socialistas, con unas medidas que suponen un grave perjuicio para la economía de este pueblo”, ha señalado Gustavo de Castro, concejal de VOX en el Ayuntamiento.

Esta subida de todos los impuestos va radicalmente en contra de las iniciativas que VOX ha planteado en el pleno municipal, según de Castro, proponiendo medidas concretas como ampliar la bonificación del IBI a familias numerosas. Por el contrario, la alcaldesa socialista, Loli Cañavate, ha decidido "empobrecer" a los vecinos elevando el tipo porcentual para bienes de naturaleza urbana al 0,64 por ciento. "Pero hay más, los tipos diferenciados que pagaban un 0,80 por ciento pasan a pagar el máximo legal de 1,10, al igual que los de categoría industrial y oficinas, además de añadir la categoría de deportes y solares que, por supuesto, también pagarán el máximo", subrayando que “todo esto, para recaudar más de un millón de euros en un Ayuntamiento que tiene millones en remanentes sin gastar. Esto es el socialismo”.

En cuanto al Impuesto de Actividades Económicas se ha hecho “justo lo contrario de lo que habría que hacer”. En este sentido, el concejal de VOX ha denunciado la subida de los coeficientes de situación en el Impuesto de Actividades Económicas, poniendo las calles de tipo 1 al máximo que establece la ley. “Pero lo más grave es que eliminan las bonificaciones para la creación de nuevos empleos”, ha apostillado De Castro.

El "desatino impositivo" del gobierno socialista de Armilla llega también al Impuesto de Construcciones, Instalaciones y Obras, que sube al 4 por ciento mientras que VOX ya especificaba en su programa que habría que eliminarlo.

En cuanto a los "sufridos" hosteleros, el sector tendrá que afrontar el pago del tipo máximo de IBI y, donde antes no se pagaba tasa de terraza, tendrán que pagar trece euros por mesa y mes a partir de la cuarta. Además, para obtener la licencia de obras habrá que hacer un depósito a modo de fianza.

Esta situación, ha recalcado, “en el segundo pleno del primer año de legislatura, justo después de las elecciones, por lo que cabe deducir que más de uno, de haber sabido este ataque directo a su economía, se habría pensado el sentido de su voto”.